La periodontitis es una enfermedad causada por una infección multifactorial que cursa con la destrucción del aparato de inserción de los dientes. El factor sin el cual no se produce periodontitis son las bacterias; sin embargo, la destrucción del periodonto es el resultado de una compleja suma de factores, algunos inherentes al propio paciente (genética) y otros ambientales que es posible modificar para minimizar las posibilidades de que el paciente contraiga la enfermedad. El estrés emocional, el consumo de tabaco y enfermedades sistémicas como la diabetes son factores que influyen en su aparición.
Gingivitis y placa bacteriana
La gingivitis consiste en una inflamación de los tejidos blandos periodontales debida, en la mayoría de los casos, a la acumulación de placa bacteriana. El grado de esta inflamación es proporcional a la acumulación de placa, aunque existen varios factores moduladores, como son el consumo de tabaco o fármacos como antiepilépticos, bloqueadores de calcio (para enfermedades cardíacas) o algunos inmunosupresores (ciclosporinas) que pueden modificar la respuesta a la placa bacteriana. El consumo de tabaco provoca una disminución de la inflamación y la hemorragia, enmascarando la presentación clínica de la enfermedad. Por el contrario, los fármacos potencian la hemorragia y el grado de inflamación.
Todos los individuos sin excepción desarrollan gingivitis tras escasos días de acumulación de placa barcteriana. Sin embargo, es posible mantener la salud gingival si se elimina la placa perfectamente mediante el cepillado dental cada 2 días.
Síntomas
Uno de los factores más peligrosos de las enfermedades periodontales es su escasez de síntomas evidentes, que puede provocar que un paciente pierda parte de su dentadura sin haberse dado cuenta de la existencia de su enfermedad, ya que muchas veces no genera dolor ni otras molestias agudas. Por tanto, las revisiones periódicas de la dentadura se consideran vitales.
Tratamiento de la enfermedad periodontal
Existen numerosos tratamientos distintos, dependiendo del estado del paciente y el desarrollo de la enfermedad. Siendo los más habituales:
- Pastas, colutorios y antibióticos
- Raspado y alisado
- Cirugía periodontal
- Regeneramiento periodontal
Todos los distintos tratamientos se basan en eliminar la placa y el cálculo, que son los principales factores causantes de la enfermedad. De todas formas, el tratamiento más efectivo es el preventivo. Con una buen higiene bucal a tiempo, acompañada de los chequeos periódicos, se evita casi toda posibilidad de contraer esta enfermedad.
